
He pensado mucho últimamente.
Pensando he salido a pasear, paseando se ha puesto a llover
pero no he corrido porque jamás ha merecido la pena correr
huir es de cobardes, dicen.
La cuestión es que me he empapado mientras paseaba pensando, y he acudido a mi mente tantas veces como minutos tiene un año porque sonaba una canción con un final tan triste que no pude siquiera empezarla.
